¿Cuáles son los peligros de la carboximetilcelulosa?
La carboximetilcelulosa sódica (CMC) es un aditivo alimentario considerado seguro para el consumo humano por diversos organismos reguladores, como la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA), la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (AESA) y el Comité Mixto FAO/OMS de Expertos en Aditivos Alimentarios (JECFA). Sin embargo, como ocurre con cualquier sustancia, el consumo excesivo de CMC puede tener efectos adversos para la salud humana. En esta respuesta, analizaremos los posibles peligros de la CMC.
- Problemas gastrointestinales:
Uno de los efectos secundarios más comunes del consumo de altas cantidades de CMC son los problemas gastrointestinales. La CMC es una fibra hidrosoluble que absorbe agua y se hincha en el tracto digestivo, lo que puede causar hinchazón, gases y diarrea. En casos raros, el consumo de altas dosis de CMC se ha asociado con obstrucción intestinal, especialmente en personas con afecciones gastrointestinales preexistentes.
- Reacciones alérgicas:
Algunas personas pueden ser sensibles o alérgicas al CMC. Los síntomas de una reacción alérgica pueden incluir urticaria, sarpullido, picazón y dificultad para respirar. En casos graves, puede producirse anafilaxia, que puede ser mortal. Las personas alérgicas al CMC deben evitar los productos que contengan este aditivo.
- Problemas dentales:
La CMC se utiliza a menudo en pastas dentales y productos de higiene bucal como espesante y aglutinante. Sin embargo, algunos estudios sugieren que la exposición prolongada a la CMC en productos de higiene bucal puede provocar erosión dental y daño al esmalte dental. Esto se debe a que la CMC puede unirse al calcio de la saliva, reduciendo la cantidad de calcio disponible para proteger los dientes.
- Interacciones farmacológicas:
La CMC puede interactuar con ciertos medicamentos, en particular aquellos que requieren un tiempo de tránsito intestinal normal para su absorción. Esto puede incluir medicamentos como la digoxina, el litio y los salicilatos. La CMC puede ralentizar la absorción de estos medicamentos, lo que puede reducir su eficacia o causar toxicidad.
- Preocupaciones ambientales:
El CMC es un compuesto sintético que no se degrada fácilmente en el medio ambiente. Cuando se vierte en vías fluviales, puede dañar la vida acuática al interferir con el ecosistema natural. Además, el CMC puede contribuir a la acumulación de microplásticos en el medio ambiente, lo cual constituye una preocupación creciente.
En conclusión, si bien el CMC se considera generalmente seguro para el consumo y uso en cantidades adecuadas, su consumo excesivo puede causar efectos adversos para la salud humana. Las personas alérgicas al CMC deben evitar los productos que contengan este aditivo. Además, la exposición prolongada al CMC en productos de cuidado bucal puede provocar erosión y daños en los dientes. El CMC también puede interactuar con ciertos medicamentos y potencialmente dañar el medio ambiente si no se desecha correctamente. Al igual que con cualquier aditivo o ingrediente alimentario, siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud si tiene dudas sobre su seguridad o sus efectos en la salud.
Hora de publicación: 11 de marzo de 2023